En un tenso episodio durante la segunda reunión del Consejo Nacional de Salario Mínimo (Conasam), el dirigente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bernardo Rojas, abandonó la mesa de diálogo en representación del sector trabajador, en protesta contra la propuesta oficial de reajuste del salario mínimo.
La iniciativa, respaldada por representantes del Gobierno y del sector empresarial, propone un aumento del 3,6%, equivalente a G. 100.000, basándose en el informe del Banco Central del Paraguay (B). Para Rojas, esta cifra resulta insuficiente ante la crisis económica que atraviesa la clase trabajadora.
“No vamos a avalar que se realice un reajuste de G. 100.000 que no sirve para nada, con base en el informe del B. Nosotros tenemos nuestra posición fundamentada de que el reajuste debe ser del 15% ante la situación grave que estamos viviendo”, expresó el dirigente sindical.
El sector trabajador insiste en que Conasam debe elevar ambos informes –el del B y el presentado por las centrales sindicales– para que sean las autoridades correspondientes las que definan el porcentaje final del reajuste.